Búsqueda de oportunidades
Siempre estamos buscando formas de mejorar las compras. Cuando vemos una categoría de productos, como las copas, que presenta serios desafíos de embalaje, aprovechamos la oportunidad para innovar con soluciones que puedan beneficiar tanto a nuestros vendedores como a nuestros clientes. Para este proyecto, trabajamos con el estudio de diseño de envases Fuseneo para identificar dónde y cómo se producen los daños más comunes y cómo proteger mejor los productos y, al mismo tiempo, reducir los residuos con un envase más compacto.
Evaluación de los daños
Las pruebas de caída revelaron que, la mayoría de las veces, las copas de vino se fracturaban en el tallo debido a un impacto indirecto. Esto parecía deberse al diseño de la estructura del inserto, que sujetaba cada copa por solo dos o tres puntos de contacto.
Una experiencia derrochadora
Se descubrió que un juego típico de copas de vino llegaba con varias capas de material de embalaje dentro de una gran caja. Si bien esta cantidad de relleno era lo habitual en productos frágiles, la experiencia de los clientes era mala y, aun así, no ofrecía la protección adecuada para minimizar los daños. El nuevo embalaje tendría que hacer mucho más con mucho menos espacio y material.
Diseñar una solución
Estaba claro que el inserto corrugado tenía el mayor potencial para añadir protección y reducir el volumen y el material de embalaje. Los prototipos conceptuales se probaron para comprobar su resistencia y, a continuación, se refinaron para reducir los residuos en la medida de lo posible sin comprometer la protección. El resultado fue una caja y un inserto compactos, livianos y del tamaño adecuado, hechos para enviarse sin necesidad de añadir plástico de burbujas ni una sobrecaja.
Optimización de la eficiencia
El embalaje original tenía los seis vasos en posición vertical. Simplemente alternando su orientación, las gafas podían encajar entre sí, ahorrando espacio y manteniendo una distancia suficiente entre cada vaso.
Medición de los ahorros
El embalaje final se comparó con el original mediante el peso del material y el volumen dimensional. Era sorprendente la cantidad de espacio y material que se podía reducir, y este ahorro se multiplicará con cada unidad que se envíe.
Compartir la innovación
El embalaje protector que ahorra espacio debe ser el estándar. Por eso, este diseño se creó pensando en toda la categoría de copas. El nuevo concepto de inserto se convirtió en una plantilla con dimensiones variables que se puede ajustar a otras formas de vidrio. A medida que otros proveedores adopten diseños como estos, se incrementará la reducción de residuos y se mejorará la experiencia de los clientes.